Laura RODRÍGUEZ / San Sebastián de los Reyes, Madrid / 28.08.2017
Lunes festivo este 28 de agosto en San Sebastián de los Reyes, día del Cristo de los Remedios en torno al cual se celebran estas fiestas. El arranque de semana y la lluvia, que finalmente ha hecho acto de presencia a dos minutos de comenzar la carrera, han marcado este tercer encierro.
Como pronosticaron ayer los directores de lidia y del encierro, los seis toros de Jódar y Ruchena para la tarde de rejones han corrido hermanados con los bueyes, acobardados por los resbalones con el suelo mojado de la noche anterior que, aunque se limpia justo antes del encierro, continuaba mojado.
La carrera también ha estado marcada por el pelaje de los astados que, con dos berrendos en negro y uno en colorado entre ellos, se podían confundir fácilmente con los bueyes.
A pesar de la lluvia hemos vuelto a ver gradas y talanqueras llenas. Y en la manga en torno a 1.300 corredores para un tercer encierro que ha sido rápido y limpio, sumando un tiempo total de 2 min. 4 seg.
El balance sanitario ha arrojado cuatro contusionados leves; uno de ellos, aquejado de dolor cervical, con posible traslado hospitalario para examen radiológico.
La previsión de lluvias se mantiene para mañana. En tal caso, las autoridades confían en que no afecten a la celebración del encierro o en que, en el peor de los casos, obliguen a retrasarlo, nunca a cancelarlo. También advierten a los corredores sobre la necesidad de llevar calzado adecuado y sobre el riesgo de caída durante la carrera de algún animal, lo que podría provocar una de las situaciones más críticas en un cierro: que se quede rezagado o se de la vuelta. En ese caso, el sistema de puertas de intermedias cortando tramos al paso de la manada asegura el recorrido. También la asistencia del personal especializado, los 15 pastores del encierro que velan por la seguridad de todos desde dentro de la manga.
Ver el tercer encierro de Sanse 2017 completo.